En el marco de las medidas adoptadas frente a la emergencia sanitaria, el presidente Klaus Mill mantuvo reuniones a distancia con gerentes y funcionarios de las sucursales y oficinas descentralizadas de la Agencia Nacional de Vivienda (ANV) como forma de acercarse al interior del país y promover acciones que tiendan a la descentralización de servicios.

Mediante la modalidad de videoconferencia, el martes 5 de mayo el jerarca se presentó ante los funcionarios y éstos tuvieron la oportunidad de trasladarle distintas preocupaciones, solicitando, además, el reintegro a las tareas de un número mayor de funcionarios en respuesta a los requerimientos de la población en los locales y más aún a través de las llamadas telefónicas que se han triplicado en comparación a los meses de enero y febrero.

Relacionado a esto, desde las dependencias se propuso la reapertura de las cajas en atención a los reclamos de los clientes para poder realizar los pagos no sólo a la ANV sino también al Banco Hipotecario del Uruguay (BHU) y fundamentalmente clientes que necesitan retirar sus ahorros.

Asimismo, los funcionarios hablaron sobre la posibilidad de generar nuevas oportunidades y servicios a toda la población en el marco de las políticas públicas de vivienda. En este sentido, solicitaron avanzar en la firma de convenios con otros organismos para maximizar la prestación de servicios a la población.

La ANV cuenta con 21 sucursales y oficinas en el interior del país, ubicadas en puntos estratégicos, con funcionarios comprometidos en seguir avanzando por la descentralización y brindar la posibilidad a los clientes de encontrar una solución a su problema de vivienda sin tener que trasladarse a Montevideo. "Tenemos las capacidades logísticas y humanas para ser el centro del Sistema Público de Vivienda en cada localidad", afirmó el gerente de la División, Jorge Queiroz.

El presidente Mill escuchó todas las propuestas y prometió, una vez que termine la emergencia sanitaria, presentarse personalmente en cada una de las dependencias.